¿Por qué se ha aprobado la ley contra el desperdicio de alimentos?
Se estima que se pierden más del 30% de los alimentos que se producen en todo el mundo y que casi la mitad de esta pérdida de alimentos se producen en las fases de postcosecha y en la venta minorista de alimentos.
Solo en 2020 según los datos del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) los hogares españoles tiraron a la basura 1.364 millones de kilos de alimentos. El confinamiento intensificó este problema, ya que se consumía mucha más comida en casa, lo que conllevaba a un aumento en el desperdicio de los alimentos.
Debido a esto y con el objetivo de reducir la cantidad de alimentos desechados, y todo lo que supone esta pérdida, se aprobó el pasado 5 de junio un proyecto de ley contra el desperdicio de alimentos en la que se contemplan multas de hasta 500.000 euros.
¿Cuándo entrará en vigor la ley de desperdicio de alimentos?
Se estipula que esta nueva ley de desperdicio de alimentos entre en vigor el 1 de enero de 2023, por el momento comenzará ahora su trámite parlamentario.
¿ Qué implica esta nueva ley de desperdicio de alimentos?
- Las empresas deberán contar con un plan de prevención para reducir al máximo las pérdidas priorizando siempre su uso para el consumo humano.
- Todos los servicios hosteleros deberán ofrecer, sin ningún coste adicional, la posibilidad de que sus clientes se lleven los restos de comida que no hayan consumido.
- Se contempla la transformación de los alimentos en otros productos comestibles, siempre y cuando los que se hayan vendido conserven su condición.
- Cuando un alimento ya no sea apto para el consumo humano, se priorizará su uso para la alimentación animal y la fabricación de piensos. O su uso ya como residuos.
¿ Cuál es el objetivo del convenio con el banco de alimentos?
Con el objetivo principal de garantizar que estos desperdicios tengan como destino el consumo humano y reducir al máximo las pérdidas de alimentos en el proceso, se utilizarán donaciones o bancos de alimentos que se encargarán de manejar el proceso a llevar a cabo con los alimentos. Esto se producirá mediante acuerdos que deberán recoger de forma clara las condiciones de recogida, transporte y almacenamiento de los productos. Esto puede suponer un coste extra para las empresas, que deberán cumplir con el correcto uso de los alimentos.
Los destinatarios encargados de manejar los alimentos desechados ya sean bancos de alimentos o otras entidades, no podrán, en ningún caso, comercializar estos productos, a su vez, deberán garantizar el correcto transporte de los productos donados utilizando un registro de entrada y salida que controle el flujo de los productos.
¿ Cuáles son las sanciones por incumplimiento de la ley?
Solo los comercios con menos de 1.300 metros cuadrados están excluidos de la necesidad de disponer de este plan.
Se considera falta grave, no contar con un plan de prevención de pérdidas y el desperdicio de alimentos. Las sanciones están entre 2.001 y 60.000 euros.
Como infracciones muy graves, se considerará a partir de la segunda infracción grave o ulterior que se cometa en el plazo de 2 años. Con sanciones de entre 60.001 euros y 500.000 euros de multa.
Entre las infracciones leves nos encontramos que las industrias, empresas no cumplan con la donación de aquellos productos no vendidos a través de un pacto o convenio. También se considera infracción leve cuando no se aplique la jerarquía de autoridades en el uso de alimentos.
La negativa a colaborar con las administraciones públicas para la cuantificación de los residuos de alimentos conlleva sanciones de hasta 2.000 euros.