¿Cuál es el panorama general a corto plazo para los mercados agrícolas?
La Invasión Rusa en Ucrania está suponiendo un problema a nivel mundial en todos los sentidos, sus consecuencias, las cuales cada vez son más visibles, afectan directamente a mercados agrícolas y suministros de productos básicos, situación que comienza a resultar en una amenaza a nivel mundial para la seguridad alimentaria.
Nos encontramos aún en pleno proceso de recuperación de las consecuencias de la pandemia del COVID-19, si a esto le sumamos los aumentos de precios y costes de mantenimiento del mercado, provocamos que la incertidumbre y la molestia de la gente aumente.
La producción y el comercio, especialmente de cereales y semillas oleaginosas, se está viendo muy afectada debido a la situación en la que se encuentra Ucrania. Los altos precios de los productos agrícolas que han aumentado en casi un 30% desde el comienzo de la invasión, además de los altos costos de energía, están provocando unos aumentos inevitables a los costos de producción(transporte, electricidad, refrigeración, fertilizantes).
Teniendo en cuenta todo esto, la previsión a corto plazo no es para nada esperanzadora en la Unión Europea, además si contamos con la situación climática actual, que conlleva la escasez de lluvias y la alta sequía que están sufriendo nuestros campos, el problema de producción se agrava aún más.
¿Cómo afecta la situación de los mercados agrícolas a los ingresos de los agricultores?
La Comisión Europea(CE) anunció en marzo de 2022 la distribución de un paquete de 500 millones de euros a los Estados Miembros para apoyar a los productores más afectados por las consecuencias de la Invasión Rusa en Ucrania. Gracias a esto los Estados Miembros podrían brindar apoyo directo a los agricultores.
Desde la Comisión Europea nos proporcionan un vistazo general de cómo se está manejando la distribución de la ayuda en sus respectivos países, y si además alguno de ellos la ha complementado con ayuda nacional. El resumen de esto fue enviado a finales de junio de 2022. Según la previsión a corto plazo se espera que el aumento de los precios al productor de los productos básicos agrícolas continúe reflejándose en los precios al consumidor de los alimentos. También se espera que los consumidores europeos puedan pasar de los productos de mayor valor a los más baratos para controlar la inflación de los alimentos.
¿Cuál es la situación en la producción de cereales?
Los precios de los cereales continúan aumentando debido a la dificultad de su producción y suministro por la situación que acontece en Ucrania, que agrava aún más los problemas que ya arrastramos de altos precios de fertilizantes y energía.
Se estima que la producción total de cereales para este año será de 286.4 millones de toneladas, lo que supone un 2,5% menos que el registro del año anterior. Independientemente de esto, se espera que la demanda de cereales y de grasa animal para producir biocombustibles se reduzca en un 1,3% y un 3% respectivamente. Sin embargo, se espera que la exportación de cereales aumente en un 14% este año compensando la reducción de exportaciones mundiales debido a los bloqueos en puertos marítimos y las restricciones impuestas por algunos importadores de cereales.
Mercado Europeo de Aceite de Oliva
La situación actual de la producción de aceite de oliva en los principales países es mixta. Aunque los rendimientos de aceitunas fueron menores año tras año en España (9%), el contenido de aceite se ha visto aumentado(+17%). En Grecia, por ejemplo, la situación es al contrario, mientras que su contenido en aceite ha disminuido, el de rendimiento de aceitunas se ha visto aumentado.
Aunque el impacto de la invasión rusa en Ucrania afectó mucho al precio del aceite de oliva, a día de hoy la situación con los precios se ha relajado un poco, aunque se siguen manteniendo muy por encima de la media de los últimos 5 años. En España y Grecia el precio nacional de aceite de oliva virgen extra ronda los 340€/100 kg(un 19% y un 16% por encima de la media de los últimos 5 años, respectivamente).
La previsión indica que estos precios se mantendrán altos debido a los costes de transporte e insumos, así como los altos precios de otros aceites y grasas. La situación podría incluso agravarse ya que la previsión para la próxima cosecha no es para nada favorable.