“Lograr que la naturaleza recupere la salud es fundamental para nuestro bienestar físico y mental y nos ayudará a luchar contra el cambio climático y los brotes de enfermedades. Es un elemento esencial de nuestra estrategia de crecimiento, el Pacto Verde Europeo, y forma parte de una recuperación europea que devuelve al planeta más de lo que le quita”. Palabras de Ursula von der Leyen que definen los objetivos de este Pacto Verde Europeo que tiene como metas temporales el 2030 y el 2050.
Es un objetivo ambicioso, muy ambicioso, con un espíritu totalmente transformador de la economía de los habitantes de la Unión, como dice Frans Timmermans, vicepresidente ejecutivo para el Pacto “Con el Pacto Verde, crearemos una economía moderna y sostenible con puestos de trabajo que perduren en las próximas décadas”.
¿Cuántos puestos de trabajo se pretenden crear?
Desde ahora hasta el 2030, el objetivo es la creación de un millón de puestos de trabajo en toda la Unión y dos millones hasta 2050.

¿Pero en que consiste este Pacto Verde?
Los ocho pilares que lo componen son:
- Un mayor nivel de ambición climática de la UE para 2030 y 2050:
Aunque la Unión ha ido dando pasos, como la primera Ley del Clima Europea, el objetivo de reducir a un 50% los gases de efecto invernadero en 2030 y un 55% con respecto a 1990 en esas fechas, es imprescindible el concurso del resto de los países que no son de la UE. Mientras muchos de estos países no compartan las aspiraciones de Europa, el objetivo estará en riesgo y está claro que a lo largo de los próximos años existirán tensiones entre amigos y aliados.
- Suministro de energía, asequible y segura:
La eficiencia energética, es un componente primordial para cumplir los objetivos marcado. Baste saber el 75% de las emisiones de gases de efecto invernadero en Europa son causadas por la producción y utilización de la energía. El uso de las energías renovables es esencial y la eliminación del carbón como fuente energética es imperativo, además de la descarbonización del gas.
Para ello, es imprescindible que el mercado energético europeo este interconectado para una mayor eficiencia.
- Modificación de la industria en pro de una economía limpia y circular:
Aunque la industria de la Unión ha empezado a dar pasos hacia esta economía limpia y circular, el 20% de las emisiones de gases de efecto invernadero son emitidos en los necesarios procesos de transformación de materiales, combustibles y alimentos.
La transición pretende brindar oportunidades de negocio, fomentando las tecnologías de bajas emisiones y la producción de productos sostenibles.
- Uso eficiente de la energía y los recursos en la construcción y renovación de edificios:
Los edificios representan en 40% de la energía que consumimos en Europa, siendo la tasa de anual de renovación del parque inmobiliario de entre un 0,4% y un 1,2%, muy por debajo de lo necesario para que nuestras viviendas lleguen a una eficiencia energética lo suficientemente alta como para no ser un problema en el objetivo a cumplir.
- Acelerar la transición a una movilidad sostenible e inteligente:
Para conseguir la neutralidad climática en el 2050, la Unión necesita reducir en un 90% la emisión de gases a consecuencia del transporte y la movilidad de las personas. El problema es que a día de hoy, el porcentaje de emisiones va en aumento.
- De la granja a la mesa: idear un sistema alimentario justo, saludable y respetuoso con el medioambiente:
Este punto es de gran interés para nosotros, por lo que en un futuro realizaremos un artículo dedicándole toda nuestra atención. Valga como introducción decir que además de unos alimentos seguros y nutritivos, la Unión se marca el objetivo de que sean sostenibles.
- Preservación y restablecimiento de los ecosistemas y la biodiversidad:
Cuidar del medio ambiente, es cuidarnos a nosotros mismos. Los ecosistemas son imprescindibles para paliar catástrofes naturales, plagas y enfermedades, ayudando a regular el clima.
- Aspirar a una contaminación cero para un entorno sin sustancias tóxicas:
Si todo este plan tiene como objetivo situar a las personas en el centro de una política saludable, justa y de bienestar, la contaminación 0 es imperativo para que las personas vivamos en entornos seguros. Para ello, será necesario la revisión de todas las políticas y regulaciones de los países de la Unión.
¿Cuál es el presupuesto para cumplir este objetivo?
Nada menos que un billón, con b, de euros es el presupuesto que pretende la Unión gastarse. Y aunque parece muchísimo dinero, la transformación social no sólo a nivel continental, sino mundial, es descomunal. El objetivo es atraer hacia esta meta a todos los países posible, amigos y socios.
La Unión pretende ser un líder sólido en esta transformación planetaria. Una ardua tarea en este mundo tan globalizado y con tantos intereses, por ahora opuestos a esta meta.